Marbella ha dejado atrás su imagen de pueblo pesquero para convertirse, a lo largo de seis décadas, en un destino de alto nivel que ahora atrae a fundadores, inversores y directivos tecnológicos de todo el mundo. Lo que empezó como refugio veraniego para estrellas y millonarios se ha convertido en una base de operaciones para profesionales con movilidad global que buscan calidad de vida sin renunciar al trabajo.
Del glamour al talento
Si en los años 60 fueron las caras famosas del cine quienes pusieron a Marbella en el mapa, hoy son los emprendedores y ejecutivos quienes aportan el nuevo brillo. Migraciones recientes de perfiles de Países Bajos, Escandinavia y Centroeuropa han coincidido con la llegada de figuras relevantes del ecosistema tecnológico internacional. Para muchos, Marbella no es ya solo un lugar de paso: es su hogar.
Figuras como Daniel Ek, fundador de Spotify, o ejecutivos de Google y fintechs internacionales han elegido la Costa del Sol no solo como lugar de descanso, sino como centro de vida y trabajo. “Marbella ofrece algo que no encontramos en San Francisco: comunidad, bienestar y una conexión humana real”, explica Kari Suleman, empresaria canadiense del sector digital.
Un entorno que facilita emprender
La ciudad ofrece condiciones ideales para vivir y trabajar: clima estable, infraestructura de lujo (hoteles cinco estrellas, escuelas internacionales, atención sanitaria de primer nivel) y conexiones aéreas directas con grandes centros económicos. Además, la convivencia entre ocio y servicios de alta gama permite a quienes dirigen equipos globales mantener una vida familiar y profesional equilibrada.
Comunidad y espacios para crear
El surgimiento de espacios colaborativos como The Pool Marbella ha favorecido la creación de redes entre inversores, startups y especialistas tecnológicos. Estos hubs funcionan como aceleradores informales donde se comparten proyectos, capitales y talento, y refuerzan la capacidad de la ciudad para convertirse en una plataforma regional de innovación.
Mercados inmobiliarios a la altura
La demanda por residencias exclusivas —tanto frente al mar como en laderas panorámicas— ha empujado los precios hacia niveles comparables a otras zonas prime europeas. Barrios como la Milla de Oro, Sierra Blanca o Nueva Andalucía continúan siendo los preferidos por compradores de alto poder adquisitivo que buscan privacidad, vistas y proximidad a centros de negocio y ocio.
Una nueva identidad para Marbella
Más allá del lujo ostentoso de Puerto Banús, Marbella está recomponiendo su identidad: pasa de ser un escaparate de extravagancias a un enclave atractivo para profesionales altamente cualificados. La combinación de clima, estilo de vida y comunidades de trabajo ha transformado la ciudad en un imán para quienes quieren compaginar empresas globales con una vida mediterránea de calidad. Original por: zoedarehall
